miércoles, 18 de agosto de 2010

AUN SUEÑO EN EL AMOR









En una noche de otoño,

cuando mayo comenzaba,

alguien sembrò una azalea,

en un rincòn de mi alma,

muy hermosa es esa flor,

mas venenosa es su planta,

que de a poco destruyò,

sueños, metas y esperanzas,

faltando tan poco tiempo,

para poder concretarlas.



Mil heridas que sangraban,

por tanto amor destruìdo,

ya mi vida no importaba,

y en tinieblas sumergido,

al Señor, yo le rogaba,

tuviera clemencia conmigo,

y renaciò la esperanza,

me mostrò nuevos caminos,

y aùn con mis sesenta,

sueños de amor yo persigo.




GUIRROMA-Guillermo R. MAGLIARELLI


( DERECHOS RESERVADOS )




DE CORAZON A CORAZON POR UN MUNDO DE HERMANOS